En las instalaciones de la Universidad de Baja California, campus Tijuana, se llevó a cabo el segundo debate presidencial de cara a las elecciones del primero de julio. El tema principal fue “México en el mundo”, con los subtemas: “Comercio exterior e inversión”, “Seguridad fronteriza” y “Combate al crimen trasnacional y derechos de los migrantes”.
Durante la hora cuarenta minutos de duración aproximadamente que tuvo está edición, los candidatos José Antonio Meade, Jaime Rodríguez Calderón, Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya expusieron sus ideas y propuestas con respecto al tema principal. Sin embargo, los candidatos no desaprovecharon la oportunidad para retarse, encararse y hacerse uno que otro comentario en tono sarcástico.
El candidato de la coalición PAN-PRD-MC, y el representante de la coalición Juntos Haremos Historia, cayeron en una serie de confrontaciones que se tornaron ríspidas y tensas cuando Ricardo Anaya se acercaba a encarar a López Obrador. Las acusaciones de corrupción no se hicieron esperar y con revista (Proceso) en mano, AMLO lanzó un golpe a quien llamó “Ricky Riquín Canallín”, mismo que respondió a Obrador con dos revistas que hablaban de la riqueza que rodea al de Tabasco.
El candidato Jaime Rodríguez Calderón retó nuevamente a AMLO a renunciar al cheque que les otorga el INE para propaganda. Mientras tanto, José Antonio Meade acusó a Anaya y Obrador de ser los más grande demagogos del país.